Todas las reformas de cocina no son iguales, en determinadas ocasiones solo se cambia la orientación y disposición de muebles y electrodomésticos, en otras se sustituyen azulejos y se amplían espacios y en otras se derriban muros y se cambian puertas y ventanas para sacar mayor partido a la distribución. Pero en el caso de hoy, la reforma ha sido completa.
El propietario de esta cocina quería reformarla por completo y darle un toque moderno y vanguardista, que con los colores y muebles que tenía (color azul y blanco en las paredes y con muebles clásicos en color madera) era imposible. Además, quería reorganizar el espacio y mejorar el acceso ya que la puerta que tenía, no permitía utilizar una parte de la cocina.
El desmontaje de todos los muebles y quitar los azulejos, permitió ver un espacio amplio cuya distribución modificamos para sacar el mayor partido posible.
La pintura a rayas de 26 cms. de ancho, en color gris perla y gris antracita le da un toque moderno y elegante que combina a la perfección con el suelo oscuro en baldosas de 60×60 porcelánico y que contrasta con el rodapié en blanco. Con el se cambió de la puerta de acceso, y su reutilización para hacerla corredera, se consiguió aprovechar más el espacio y que la puerta no resultara incomoda para acceder a la cocina.
Para la colocación de los muebles (que se eligieron en blancos en alto brillo porque dan sensación de modernidad y son muy cómodos en su mantenimiento y limpieza) y electrodomésticos, optamos por dejar una pared sin muebles para dar más amplitud y se coloco una “isla” en el centro con la placa de cocina y una potente campana extractora de diseño que consiguen dar a esta cocina el aspecto moderno e innovador que estabamos buscando.
