En la actualidad, muchas personas se quejan de la dificultad que supone vender una casa de 2ª mano. Esto se debe a que la crisis económica que hemos sufrido, por una parte ha aumentado la oferta de ventas de viviendas de 2ª mano y por otra, ha hecho que el precio de la vivienda nueva baje.
La única forma de sobresalir en un mercado que se encuentra lleno de solicitudes, es tener una vivienda que consiga “enamorar” a los futuros compradores, destacando entre las demás ofertas y pudiendo además, incrementar el valor de venta. Una pequeña reforma a la vivienda, conseguirá que los futuros compradores tengan nuestra vivienda en venta como una alternativa clara de compra.
Los aspectos claves que pueden llevar a que esto sea un éxito, serían por ejemplo: que el estado de las tuberías, calefacción o aire acondicionado de la vivienda fuesen los adecuados, optimizar la iluminación y los colores para resaltar el tamaño de las estancias de la casa: así conseguimos ampliar o dotar de carácter un espacio (una simple mano de pintura beneficia enormemente la venta de cualquier inmueble).
Un “acuchillado” del suelo de madera, un lijado y barnizado de puertas o retocar juntas, azulejos y poner mamparas en baños, puede hacer que vuestro hogar reciba más ofertas de compra en menos tiempo.
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